Torta capuccina, cremosidad a cada bocado
He visto que la torta della nonna os encantó así que para hoy he preparado la torta capuccina, un postre tradicional italiano de la provincia de Modena.
Llevaba tiempo queriendo preparar esta tarta italiana (me vais a escuchar mucho tiempo con esta frase porque que no publicara no quiere decir que dejara también de pensar en que preparar…así soy yo, pensando siempre en comer). Mi marido dice que es uno de los mejores postres que he preparado para el blog, le ha encantado a él y a todos los que la han probado. La tarta cappuccina está compuesta por una base de pasta frola, una capa de mermelada y una deliciosa crema de almendras ( crema frangipane). El contraste de texturas está asegurado. La tarta cappuccina es deliciosa recién hecha pero si tienes la paciencia de esperar al día siguiente es aún más rica porque los sabores se van asentando, y sobre todo la crema de almendras queda aún más espectacular.
Tengo que decir algo importante, la receta tradicional de la torta cappucina se prepara con una «confettura di amarene brusche» que es una mermelada hecha con amarene (cerezas negras), un fruto parecido a las cerezas con sabor más acido y piel más dura, el resultado es una mermelada más acida. Verás que en mi receta he utilizado mermelada de frambuesa que tiene un toque ligeramente acido pero no es una mermelada de amarene brusche. Así que lo admito, a mi tarta le falta ese toque tan autentico italiano que suelen tener mis recetas. Pero ya sabes, me adapto y busco la manera de preparar recetas italianas sin alejarme mucho de la tradición.
Ojala encuentres esa deliciosa mermelada italiana para saborear esta tarta tan especial en toda su autenticidad.
Si esta tarta con frangipane (crema de almendras) te ha gustado prueba también la tarta de manzana con crema de almendras. Es otra receta irresistible.


- 180 g de harina común
- 100 azúcar glas (casero)
- 100 g de mantequilla a temperatura ambiente
- 1 yema de huevo tamaño L
- 5 g de levadura en polvo para postres
- 2 cucharadas de agua fría (opcional)
- 1 pizca de sal
- 120 g de azúcar
- 140 g de mantequilla a temperatura ambiente
- 2 huevos
- 140 g de harina de almendras molidas finas (harina de almendras)
- 40 g de harina
- 280 g de mermelada de frambuesa ("amarene crusche" según receta tradicional u otra que te guste)
- 2 cucharadas de almendras en laminas
- Azúcar glas para espolvorear
- Prepara primero la masa. Pon en un bol la mantequilla fría cortada en cubitos con el azúcar glas. Trabaja con las puntas de los dedos hasta que queden bien incorporados (cuidado, no calientes demasiado la masa).
- Agrega la yema de huevo e incorpórala ayudándote con una espátula.
- Tamiza la harina junto con la levadura y añádela a la mezcla anteriormente preparada, agrega sal y 1 cucharada de agua. Mezcla y amasa con las manos hasta conseguir una masa homogénea. Si la masa te parece algo seca puedes añadir otra cucharada de agua.
- Aplasta la masa y dale forma circular. Envuelve en film transparente y deja reposar en frigorífico durante 1 hora.
- Ahora prepara la crema. Pon la mantequilla a temperatura ambiente y el azúcar en un bol, trabaja con una espátula para amalgamar los ingredientes.
- Agrega primero un huevo, incorpóralo a la masa con la espátula y luego agrega el otro. Luego utiliza unas varillas eléctricas a baja velocidad para montar un poco.
- Ahora agrega la harina y las almendras molidas. Primero remueve con las varillas y luego acciónalas a baja velocidad. Una vez que la crema esté lista trasládala en una manga pastelera.
- Montaje de la tarta cappuccina. Cuando la masa haya reposado, extiende una hoja de papel de horno en tu mesa de trabajo (también puedes hacerlo directamente en la encimera previamente enharinada) y estira la masa con forma de circunferencia con un rodillo. La masa tiene que quedar con un grosor de no más de 0,5 cm. La circunferencia tiene que quedar ligeramente más grande que la base del molde.
- Traslada la masa a un molde preferiblemente desmontable, si la has extendido sobre el papel vegetal no será necesario engrasar el molde. Ajusta la masa presionando ligeramente sobre ella para que se adhiera bien al molde. Extiende en la base de la tarta la mermelada y por encima distribuye con la manga pastelera la crema de almendras, luego repasa con una espátula para que se reparta uniformemente.
- Recorta con un cuchillo los bordes de masa que quedan por encima del relleno y hornea en horno ya caliente a 180º C durante 35 minutos o hasta que la tarta haya quedado bien dorada.
- Una vez lista espera a que esté templada para desmoldar y espolvorear con azúcar glas. Si puedes resistirte espera a que pasen unas horas antes de comerla porque es una tarta que al día siguiente es aún más rica.
- Prepara primero la masa. Pon la mantequilla bien fría cortada a cubitos en el vaso, agrega el azúcar 30 segundos velocidad 3.
- Agrega la yema 10 segundos velocidad 3.
- Añade la harina previamente tamizada con la levadura, la sal y 1 cucharada de agua. 40 segundos velocidad 3. Traslada la masa a la encimera, trabájala un poco con las manos y dale una forma redonda y aplastada. Envuelve en film transparente y deja reposar en frigorífico al menos 1 hora.
- Ahora prepara la crema. No es necesario lavar el vaso. Pon mantequilla y azúcar en el vaso 30 segundos velocidad 3.
- Agrega primero un huevo y programa 20 segundos velocidad 3. Agrega el otro huevo 20 segundos velocidad 3.
- Agrega la harina de almendras y la harina común 30 segundos velocidad 3. Rebaja la crema con una espátula y vuelve a programar 10 segundos más a velocidad 3.
- Traslada la crema a una manga pastelera y sigue con el paso 8 del metodo tradicional.